BALANCE ASOVEN, ASOCIACIÓN DE VENTANAS DE PVC Datos del mercado de la carpintería de PVC y de la materia prima en general Dentro del sector de la carpintería de PVC existen 650 empresas en España que fabrican ventanas y cerramientos de PVC que suponen 19.000 personas implicadas. En Europa en 2014 el sector del PVC empleó a más de medio millón de personas, con una demanda de 5,17 millones de toneladas (es el tercer plástico con más consumo, 11%).En España en 2014 la demanda alcanzó más de trescientas mil toneladas. Cuota de participación de la carpintería de PVC en el mercado español El mercado general de las ventanas se redujo considerablemente de 10.980.000 unidades en el año 2006 a 1.970.000 en el año 2014. A pesar de estas cifras tan negativas, la carpintería de PVC se encuentra en una cuota de participación del 46, 70%, con 920.000 unidades de PVC fabricadas en el 2014. La media Europea es del 56,00% lo que indica un futuro muy prometedor para España, con grandes perspectivas para acercarnos a esta cifra tan importante. El PVC es el producto más utilizado para la fabricación de ventanas en los principales países de Europa, siendo los porcentajes de carpintería de PVC los siguientes: Alemania, 70%, Francia 65%, Inglaterra 60 %, Austria, Suiza e Italia 51,00%, Polonia y Eslovenia 80,00%, Rusia 85,00%. En EEUU el porcentaje de ventanas de PVC es del 50%. España recoge una singularidad con respecto a las tipologías de ventanas del resto de Europa y es que las ventanas en España incorporan la persiana en la concepción del cerramiento y cada vez más se incrementa el uso del monoblock. En España se está produciendo un crecimiento progresivo en la demanda de la carpintería de PVC, que se puede colocar sin ninguna restricción en el 100% del territorio nacional, ya que cumple con las nuevas exigencias del CTE. Según se desprende de un estudio realizado por la universidad Politécnica de Cataluña, realizado por el departamento de proyectos de ingeniería a través del laboratorio de Modelización Ambiental, la carpintería de PVC se trata, según los expertos, de un material clave para cumplir con las exigencias del Protocolo de Kioto, de la obligatoriedad de la reducción de CO2 a la atmósfera. El uso e instalación de la carpintería de PVC en los hogares, aporta un ahorro energético superior en un 45% al aluminio y en un 15% a la madera. La instalación de ventanas de PVC reduce el consumo energético en los hogares. Además las ventanas de PVC reducen las emisiones de CO2 a la atmósfera en un 161% con respecto a las ventanas de aluminio y en un 52% con respecto a las ventanas de madera. ANDECE, ASOCIACIÓN NACIONAL DEL PREFABRICADO DE HORMIGÓN Alejandro López Vidal, Director Técnico Expectativas de la industria del prefabricado de hormigón A pesar de que la inversión prevista en obra pública y la incertidumbre que rodea a la edificación no permiten pensar en un crecimiento global del conjunto de la construcción, hay dos factores clave que permiten vislumbrar un escenario más positivo en el uso de elementos prefabricados de hormigón, al reconocerse ya como un concepto con identidad propia frente a otros materiales de construcción y soluciones alternativas: 1. La progresiva implantación del concepto BIM en los proyectos de construcción, donde las soluciones industrializadas que quedan perfectamente definidas e identificadas desde el proyecto, tienen un mejor encaje; 2. Una mayor demanda de soluciones constructivas sostenibles: la creciente sensibilidad a exigir que se demuestre por parte de proveedores de materiales de construcción, un cumplimiento de las tres dimensiones del desarrollo sostenible (medioambiental, social y económica), debe seguir impulsando a que éstos respondan satisfactoriamente en aspectos como la eficiencia energética, la economía circular o la durabilidad, factores clave en los que los elementos prefabricados de hormigón se presentan como una solución eficaz que combina, quizás mejor que ningún otro, ofreciendo una mejor respuesta gracias a su elevada inercia térmica, su reciclabilidad o su probada extensión de la vida útil, respectivamente En definitiva, la construcción industrializada con elementos prefabricados de hormigón presenta un excepcional potencial de crecimiento sí el mercado y las políticas reglamentarias siguen introduciendo una mayor consideración hacia ciertos aspectos sostenibles. Como ejemplo revelador, la nueva versión de la certificación LEED 4.0 ha potenciado algunos indicadores en los que los elementos prefabricados de hormigón pueden contribuir a obtener la máxima nota posible en cerca de 20 parámetros, como por ejemplo, la menor perturbación de la parcela al no necesitar grandes espacios de acopio de materiales o de montajes, la mejora de la eficiencia energética, la reducción del efecto isla de calor, la posibilidad de utilizar elementos fabricados con hormigones reciclados o el suministro de materiales locales a una distancia máxima de 160 km. (100 millas), que se encuentra dentro de las distancias habituales de fábrica a obra 18 • NOV|DIC 15 ECOCONSTRUCCIÓN
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