Por Juan Valsechi, Asesor Independiente, Montevideo URUGUAY. Miguel Ángel Lanao, Consultor, Tarragona ESPAÑA.
NDDM2 (Normativa Domótica Densidad Metros Cuadrados) es un tipo de idea que hace a los discapacitados alentar a tener nuevas normativas, ampliando y unificando un gran número de normas vigentes.
Introducción
Hoy quiero poner en debate el redefinir las vulnerabilidades y desigualdades urbanas. A mi criterio este eje que hoy contempla las dimensiones sociales de la arquitectura y el urbanismo, hace generalmente foco en las personas que viven en condiciones precarias en barrios marginales; o sea que solo contemplan la desigualdad económica; pero no contemplan la desigualdad que existe en la arquitectura para las discapacidades. El espíritu de la arquitectura accesible fue bien capturado por el arquitecto Ronald Mace, citado en un editorial del New York Times de 1997 que preguntaba "si no estamos diseñando para seres humanos, ¿para quién estamos diseñando? Diseñemos todas las cosas, todo el tiempo, para todos. Es a donde nos dirigimos”.
Hoy hay que pensar que generalmente las Normas, los reglamentos y la gente, hacen que los derechos de los discapacitados queden trancados por escalones mentales al no ser capaces nosotros de prever, estudiar y aprobar soluciones. Hay que entender que los tiempos de las personas discapacitadas son diferentes a los nuestros.
Resumen
Entender el cuerpo y al ser humano con el fin de diseñar para personas de todas las formas y tamaños nos lleva a la antropometría. La misma es el estudio de las medidas del cuerpo humano y suele usarse para el diseño de muebles de oficina. Este es uno de los estudios esenciales promovidos y desarrollados por las empresas fabricantes de mobiliario, con especial énfasis en la diversidad de tamaños físicos que existen en todo el mundo.
A lo largo de los años, la precisión de estos estudios ha aumentado, como ser a modo de ejemplo, mediante el uso de exploraciones tridimensionales.
Este prefacio implica indirectamente el reconocimiento de que el uso de la tecnología sobre el cuerpo y el ser humano es el futuro para mejorar la calidad de vida. Es de sentido común que un buen diseño se basa en las personas y en lo que realmente necesitan.
Tenemos como objetivo, investigar y hacer pensar en mejorar los nuevos desarrollos inmobiliarios de edificios para hacerlos más accesibles e inteligentes en sus elementos a fin de que sean un soporte eficiente, seguro y adecuado para que las personas que presentan discapacidad motriz puedan aumentar su autonomía y calidad de vida mediante la aplicación de normas de previsión en domótica.
Se entiende que evolucionar generalmente es un cambio gradual. Hoy no estamos de acuerdo, ya que se debe hacer un cambio radical exigiendo la inclusión en las normas ya existentes de accesibilidad a las previsiones en domótica.
Se debe plantear el debate del tema cuanto antes, ya que un posible escenario para el año 2050 es que un tercio de la población mundial tenga una necesidad de accesibilidad. Consideramos que la idea de adaptar tecnológicamente nuestro hábitat ha dejado de ser una idea excéntrica y suntuosa para convertirse en una necesidad cierta que solo demanda actitud y disposición para incluir en las normas la previsión domótica, así como también la homologación de las áreas para apartamentos de menos de 50 m2.
Es por ello que la acción de unificar y sumar a las actuales normativas la previsión para estos casos es indispensable en nombre del progreso y la evolución.
Como dijera el arquitecto danés Jorn Utzon, “Es necesario tener una sana visión de la vida. Entender el concepto que significa caminar, sentarse y tumbarse cómodamente, disfrutar del sol, la sombra, el agua contra el cuerpo, la tierra y todas las sensaciones menores. Si se quiere alcanzar la armonía entre el espacio que se crea y lo que en él se va a desarrollar, la base de la arquitectura debe ser el bienestar. Resulta simple y muy razonable".
Antecedentes
Las estimaciones de la población con discapacidad en Europa, según las principales fuentes estadísticas, permiten hacer una estimación del número de personas con discapacidad en la Unión Europea, cubriendo a la población de 16 y más años residentes en domicilios particulares.
En términos absolutos, supone que en el conjunto de la Unión Europea habría unos 113 millones de personas de 16 o más años con limitaciones en la actividad, de las cuales alrededor de 35 millones experimentarían limitaciones severas.
Conforme avanza la edad se incrementa el porcentaje de personas que tienen dificultades en las actividades básicas. Este incremento es especialmente notorio en las dificultades relacionadas con actividades motoras (por ejemplo, el porcentaje de personas con dificultades para caminar o subir escaleras pasa del 0,6% en el grupo de entre 15 y 24 años al 10,2% en el grupo de entre 55 y 64 años).Las deficiencias más frecuentes en las personas de dieciséis y más años con discapacidad que residen en hogares familiares son las de tipo motora, que se da en el 39,2% de las personas con discapacidad. En España hay alrededor de 3,8 millones de personas que tienen algún tipo de discapacidad. Según el Instituto Nacional de Estadística, en uno de cada cinco hogares españoles vive al menos una persona con discapacidad, lo que representa el 20% de los hogares y nunca se sabe cuándo uno (usted) puede pasar a ser una de ellas. Hoy, en la mayoría de las edificaciones de construcción nueva ya se aplica en lo básico la normativa para que sean accesibles; aunque la misma no contempla la previsión de la domótica. Es de hacer notar que los inmuebles que tienen más de 25 años en España, no suelen estar adaptados, de modo que para casi 4 millones de personas, encontrar una casa y más aún un apartamento adaptado a las necesidades puede ser una odisea, ya que el parque español de inmuebles no está preparado; aunque hoy día existen organizaciones/fundaciones que financian obras para adaptar las mismas a las necesidades de la accesibilidad.
Datos obtenidos
En España, recién en los años 60 salió la Ley sobre Propiedad Horizontal en la que ya se empezaba a hablar sobre accesibilidad. No fue hasta el año 2007 cuando se publicó el Real Decreto sobre condiciones básicas de accesibilidad de las personas con discapacidad para el acceso y utilización de los espacios públicos urbanizados y edificaciones que tuvo un nuevo empuje en su definición. Luego, desde el 4 de diciembre 2017, al haberse aprobado el “Texto Refundido de la Ley General de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social”, se hizo obligatoria la accesibilidad para todos los edificios. Esto es lo legal; pero hay que seguir para que la inclusión de la “previsión” en la domótica sea una realidad para todos los nuevos edificios.
La tendencia del avance en España es lenta si se considera que pasaron 57 años para hacer obligatoria la accesibilidad para todos los edificios.
En Montevideo (Uruguay), no en la domótica, pero si en la accesibilidad existe una resolución departamental para que cualquier edificio que cuente con cuatro o más viviendas, deba tener un “itinerario” accesible desde su acceso hasta el estar o comedor según la Norma UNIT 200. De todas maneras, empresas de domótica a través de diferentes estrategias de marketing y comerciales, han comenzado a intentar “implantar” la previsión domótica en los desarrollos inmobiliarios mediante esfuerzos propios, (1) ya que al no estar incluido en la normativa, hacen a su cargo el desarrollo de la previsión de la incorporación de inteligencia en los edificios.
Asimismo, si se analiza el cuadro de inclusión en la vivienda del Informe Olivenza año 2017/2018, podemos ver que, en el esquema de indicadores de inclusión social y discapacidad, el mismo también hace referencia al hacinamiento grave (<15 m2/persona), lo cual también influye directamente en la accesibilidad.
Aunque la accesibilidad refiere a "todas las personas", asociada a una realidad esencial: la diversidad característica entre los seres humanos en cada instante y la diversidad de las situaciones, limitaciones o condiciones de cada persona durante el ciclo de su vida, situaciones específicas de edad o actividad, situación particular permanente o eventual, casos de lesiones severas o discapacidades complejas que requieran una atención particular o individual hacen casi imposible hoy la previsión total.
Por lo anteriormente mencionado solo se abarca en esta presentación a la discapacidad motriz (mayor porcentaje dentro de las discapacidades) y a las personas que por edad o comodidad desean usufructuar la misma.
Entonces, ¿cómo podrían preverse edificios con apartamentos accesibles para discapacitados motrices de ayer, de hoy y del mañana? La respuesta es con recursos preventivos y no reactivos
Apoyándonos en informes sobre la situación general de la discapacidad en España (Olivenza 2017/2018) y refiriéndonos básicamente a la discapacidad motora (personas en silla de ruedas y con movilidad reducida), podemos llegar a conclusiones que no alteran en demasía la ecuación económica de los desarrolladores inmobiliarios, y son un paso más para avanzar en minimizar la brecha que hoy día tienen los edificios para la población de discapacitados motrices. También es un nuevo punto de vista de cómo encarar los edificios inteligentes, viéndolos hoy día para que mediante la previsión domótica, luego cada quien habilite la inteligencia necesaria para sus necesidades, contemplando a su vez su economía.
Es por ello que la propuesta plantea que se debería tener en cuenta la condición de movilidad reducida en las medidas, diseños y tecnologías de los edificios nuevos de apartamentos, dejándolos “preparados” con la previsión necesaria para facilitar el ingreso de la inteligencia al mismo.
Existen muchas normativas según las diferentes comunidades, pero el fin es intentar estandarizar, regularizar y ampliar la inclusión de la accesibilidad que actualmente rige en la Normativa Estatal de la Vivienda. Generalmente, las mismas contemplan repetidamente y en muchos casos el grado de accesibilidad de un edificio (condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación de las personas con discapacidad para el acceso y utilización del edificio); pero no contemplan la previsión de la incorporación de tecnología (domótica). Definiendo entonces el concepto de a qué nos referimos cuando mencionamos domótica, llegamos a la siguiente definición: “La domótica es un conjunto de elementos electrónicos que interactúan por intermedio de un software y que se comunican de forma independiente o conjunta en el hogar según las necesidades de las personas. Estos componentes permiten que la vivienda pueda ser programable a esas necesidades cada día más específicas y flexibles, permitiendo crecer a lo largo del tiempo.” (1)
Tipo de discapacidades España 2008. (2)
Idea
Consideramos que para avanzar en la integración de edificios más inteligentes, la acción no pasa solo por ideas que sean realizables en el “papel” y luego queden en “letra muerta”. Se necesita que, mediante la previsión de medidas y normas, se pueda llegar a “universalizar” y reducir de esa manera la brecha existente para que ya en el proceso de construcción de edificios, estos puedan llegar a ser inteligentes y accesibles en forma parcial y autónoma según las necesidades del usuario.
¿Cómo llegaríamos a ello? ¿Cómo repercutiría en los costos?
Propuesta
Se consideran dos tipos de requisitos básicos para que los edificios tengan mayor autonomía y confort tanto en los apartamentos como también en zonas comunes. Estos se dividen en dos ramas de previsión; una la domótica y otra el “material/diseño“ o “materiales apilados” que ya se encuentra en las normas, aunque no unificados ni ampliados con la previsión domótica.
Previsión domótica. La incorporación de tecnología domótica en el proceso de construcción de obras se considera una interface vital para prever un edificio inteligente. La previsión domótica apunta a aquellas personas que deben cubrir necesidades básicas por problemas de discapacidades, así como también a personas que desean un mayor confort. Esta permite ampliarse a lo largo del tiempo en función de las necesidades de las personas, controlando su vivienda por medio de un dispositivo móvil con Smartphone, mediante el uso de una aplicación. Hoy día es como dejar la previsión de un aire acondicionado. Con dejar algunos metros de rollos corrugados para cables y un área de tablero - (variables según los m2 del inmueble), ya es más que suficiente (1). También existe la posibilidad de hacerlo sin cableado; - con o sin WiFi-, aunque siempre existe la previsión, ya sea en dejar interruptores cerca de donde se colocaran persianas de enrollar, siendo las cajas estancas de interruptores con una profundidad mínima de 7 cms o dejando un espacio de un riel en el tablero eléctrico entre otras previsiones; ya que las mismas deben estar en concordancia con los elementos que el desarrollador defina. Hay que entender que hoy día las viviendas no son un conjunto de “materiales apilados”, sino que pueden ser un “ser vivo” con quien relacionarnos sobre nuestras necesidades mediante una sola acción. Eso se llama evolución.
Resumiendo, en términos de inversión, la previsión de la instalación de domótica en los apartamentos, tiene un costo despreciable y es un plus al momento de la venta o el alquiler (1). Consideramos que la misma llevada al servicio de los discapacitados motrices, solo puede ser incluida de manera “obligatoria” mediante la promulgación de normas. Entendemos que seguramente no captara todas las expectativas para estas personas, ya que hoy día los que pueden acceder a la tecnología, lo hacen a la medida de sus necesidades. Esto no implica un desconocimiento del problema, sino el comienzo por intermedio de la previsión en masificar los elementos básicos para componer un edificio inteligente, permitiendo mediante la inclusión de personas con discapacidad motriz, que otras personas que no tienen la misma discapacidad puedan mediante esa previsión optar por empezar a “dar inteligencia” a sus apartamentos a fin de ampliar el abanico de oportunidades y crecimiento al sector de la tecnología. Entonces para este caso, la domótica se definiría como una previsión limitada de instalaciones para poder incluir servicios inteligentes que realicen funciones básicas. La idea es que mediante una aplicación sea posible subir persianas de enrollar, prender luces, audio, calefones/termotanques, aire acondicionados, abrir portones, puertas y muchas acciones más que me puedo estar olvidando u hoy día están en proceso de desarrollo para otras discapacidades, reduciendo de esta manera la dependencia de terceros.
Esto para los discapacitados motrices aporta independencia y para los que no, aporta comodidad.
De esta manera tendríamos edificios “preparados” con la previsión para ser inteligentes de una manera normalizada, segura y eficiente. Esta previsión quedaría invisible para el usuario, pero sería un mojón para el crecimiento de la tecnología en los edificios, dejando de ser un rubro “suntuario” por el solo hecho de tener la previsión para ser inteligente a ser una “necesidad” básica optativa para los ocupantes de la vivienda.
En segunda instancia, integrando ahora si los “materiales apilados” o “material/diseño”, según el orden y el diseño, se sumarían también a la previsión domótica para la discapacidad motriz, las normas ya existentes en muchos países como ser:
Pocas veces en los nuevos desarrollos inmobiliarios se habla sobre cómo influye la accesibilidad en la construcción, por lo menos en la concepción de los espacios adaptados o pensados para utilizar por cualquier persona con movilidad reducida.
Asimismo se considera que también debería preverse en determinadas paredes una franja para el fácil montaje de pasamanos/agarraderos para que puedan usarse para mantener el equilibrio, así como también la ducha debería tener la previsión en la pared para colocar barras de apoyo y sujeción, además de tener un asiento o banco en su interior. Sumado a los interiores, se tienen que considerar unificando criterios los espacios comunes como ser: acceso al edificio, escaleras, zonas comunes, ascensores y estacionamientos. Los estacionamientos deberían cumplir con los requisitos mínimos para permitir el ascenso y descenso de los vehículos de las personas usuarias de sillas de ruedas, ya sean que viajen en la misma silla o realicen transferencia a la misma.
Proceso
En general, un edificio no preparado no se adapta en lo básico hasta que existe una necesidad planteada por parte de algún copropietario de disponer como mínimo de una rampa y/o ascensor. Para que la domótica se considere un bien necesario y tenga éxito para la sociedad y en especial para las personas con movilidad reducida se deben de considerar los factores básicos humanos en el diseño y elaboración de estos servicios y productos. No estamos hablando de la antropometría, sino de integrar en los ciclos de ingeniería de diseño de los edificios, fases específicas de evaluación metodológica de algunos factores humanos. Para poder llevar a cabo una buena instauración de los sistemas domóticos deben de darse algunos componentes básicos como ser la formación en diseño para todos a fin de que los futuros diseñadores de servicios y productos adecuen la diversidad funcional humana en aquellos. También en la normalización, incluir la participación de colectivos de usuarios que demanden accesibilidad en productos y servicios en aquellas entidades de estandarización y normalización, como puede ser en España AENOR. Esta participación, sumada a la previsión sería el camino en el que el propio usuario colaboraría para subsanar los distintos inconvenientes que puedan suscitarse entre los diseños, los usos y aplicaciones reales.
Debate. Accesibilidad por medio de la domótica y la redistribución de m2
El concepto de accesibilidad ha ido evolucionando en los últimos años hasta llegar a un nuevo enfoque, donde lo primordial reside en concebir el entorno y los elementos de forma inclusiva o apta para todas las personas, potenciando la condición del medio físico que permite acceder con seguridad, emplear sus recursos, relacionarse y comunicarse con sus elementos y las demás personas.
La accesibilidad va más allá del diseño propiamente dicho, dirige sus pasos hacia un compromiso social presentando multiplicidad de vertientes en función de ciertas condicionantes (personales, ambientales, sociales, culturales), por lo que los ámbitos de actuación pueden ser amplios y variados. Particularmente estas ayudas especiales resultaran necesarias al momento de diseñar edificios de apartamentos accesibles o eliminar dentro de lo posible las barreras arquitectónicas en viviendas y en especial de apartamentos existentes donde viven personas con algún grado de discapacidad, tomando en consideración la individualidad de la persona, su discapacidad, sus posibilidades y sus limitaciones. Una de las formas de conseguir estas adaptaciones es mediante la incorporación en forma “obligatoria” de la previsión de nuevas tecnologías (domótica) en las normas.
El objetivo es, como se mencionó al principio, el investigar y hacer pensar en mejorar los nuevos desarrollos inmobiliarios de edificios para hacerlos más accesibles en sus elementos a fin de llegar a ser estos un soporte eficiente, seguro y adecuado para las personas que presentan discapacidad motora, permitiéndoles aumentar su autonomía, independencia y comodidad.
En definitiva estaríamos cumpliendo con el artículo 49 de la Constitución española de 1978. Los poderes públicos realizarán una política de previsión, tratamiento, rehabilitación e integración de los disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos, a los que prestarán la atención especializada que requieran y los ampararán especialmente para el disfrute de los derechos que este Título otorga a todos los ciudadanos.
¿Por qué hacemos hincapié en usar más el término “apartamentos” en vez de “vivienda”? Entendemos que la palabra “vivienda” hace una generalización que también abarca a los inmuebles “casas”; donde las personas tienen más libertad de hacer los cambios necesarios, por lo que podrían eventualmente no ser incluidas en la normativa. El caso de los “apartamentos” abarca ya una conjunción de intereses que empiezan desde el diseño del proyecto para luego necesitar la aprobación de terceras personas y organismos estatales para realizar modificaciones. Consideramos que se debe tener en cuenta que la seguridad que implica la integración de la domótica es un aspecto esencial e implícito en el concepto de accesibilidad.
Densidad - Regulación de personas por metro cuadrado
Entendemos que se deberían de considerar algunas normas a los efectos de prever el hacinamiento de las personas, considerando que se debería instaurar una normativa para las viviendas (apartamentos) de menos de 50 m2. Tomando como ejemplo las normativas de diferentes países del mundo, en las cuales la superficie mínima útil construible para viviendas es de 36 m2 (promedio), hacemos el siguiente razonamiento. La construcción de una vivienda (apartamento) varía en función de la cantidad de habitantes y las condiciones mínimas de habitabilidad y accesibilidad. Cuando revisamos las normativas en diversos países, existe un rango que oscila entre 30 y 40 m2 para 3 o 4 ocupantes. Bajo estos parámetros no oficiales de 10 m2 por persona y unos 20 m2 para zonas comunes, tomaremos una proporción más que lo habitual y definiremos una carga de ocupación de vivienda (apartamento) de 15 m2 de superficie útil por persona. Es de considerar que para que sea accesible y tenga lo mencionado anteriormente como ser la superficie útil por persona, para contar con accesibilidad motora al metraje se le debería de considerar un estimado no oficial de un 20% más de área (18 m2). Una de las principales necesidades insatisfechas en la discapacidad permanente es el confort, lo que está relacionado directamente con aspectos de accesibilidad y domótica; pero no es directamente proporcional al metraje cuadrado.
Ejemplo de borrador de planta mínima para una persona.
Conclusiones
De esta manera consideramos que la domótica integra hoy día un nuevo pilar en la arquitectura evolucionando en los proyectos arquitectónicos a un nivel más completo y amigable. Sumado a todos los considerandos, no hay que dejar fuera la eficiencia energética, la cual aporta sostenibilidad y realiza en el correr del tiempo la amortización de la domótica instalada.
En la actualidad no existe realmente la homologación de viviendas en cuanto a la capacidad autorizada para el uso de las mismas, como existe en otros ámbitos como pueden ser vehículos, ascensores, locales, etc. Por tal motivo, se considera que además de llevar a cabo la homologación de sistemas constructivos (aprobación que permite a las empresas la presentación de propuestas de sistemas constructivos no tradicionales), se debería legislar para que las viviendas (apartamentos) no sean “tóxicas” en el sentido de densidad de personas por m2 ya que también influye indirectamente en la accesibilidad. La homologación en este sentido, tiene una especial importancia y vendría a ser un punto de quiebre en la normativa para la vivienda, la salud pública, la accesibilidad y la economía. De acordarse una previsión de accesibilidad y homologación se podrían construir apartamentos con las previsiones para discapacidades motoras, así como también con menores metrajes a los hoy día autorizados sin que se afecte la movilidad, la salud y la convivencia de las personas. Es por la accesibilidad y la densidad que insistimos en la inclusión de sociólogos en los equipos de diseños arquitectónicos para como mencionamos al principio, se pueda entender al cuerpo y en especial al ser humano. Es por la accesibilidad y la seguridad que se debe incorporar la previsión de la domótica. A lo largo de los años, muchos elementos innovadores en su tiempo como ser la luz eléctrica, la sanitaria, eran considerados “suntuarios”; por lo que hoy tenemos que empezar a reconocer a la domótica como una necesidad “no suntuaria” para el ser humano e incorporarla a las normas y por ende a los diseños de proyectos.
Por último, la responsabilidad social empresarial, también conocida por su sigla RSE, es como se denominan las actividades y las políticas desarrolladas por empresas para contribuir a la comunidad. Se entiende que la responsabilidad social empresarial trasciende el afán de lucro de una compañía, constituyéndose como un aporte al bienestar de la sociedad.
La RSE no tiene que ver con el cumplimiento de la ley, ya que se sobreentiende que respetar la legislación es obligatorio. Estas políticas apuntan a realizar algo adicional para paliar la pobreza, ayudar a proteger el medio ambiente, fomentar la educación, por citar algunas posibilidades.
Entonces surge una pregunta, para adelantarse a la burocracia y antes de ponerse de acuerdo en las normativas, ¿no podemos integrar esta idea para que sea considerada como RSE por las empresas desarrolladoras?
Sabemos que será difícil ponerse de acuerdo en establecer normas. Más aún cuando se observa que a pesar de la “globalización”, sumado a la “homogenización” de la moneda en Europa, aún existen aproximadamente 182 tipos de moneda en el mundo. Sumado a ello y al criterio “universal” que se le quiere dar a las normas de previsión de los discapacitados, hay que recordar también que hace siglos conviven el metro lineal y la yarda; el litro con el galón, el kilo con la onza y así una cantidad de medidas con las que a pesar de la globalización, el mundo no ha logrado acordar una unificación.
También hay que tener en cuenta – y ahora me estoy refiriendo a las Normas – que hasta en un mismo país – y no estoy hablando específicamente de España – los gobiernos regionales difieren en las normativas de los discapacitados como si los discapacitados de Andalucía, Aragón, Islas Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad de Madrid, Comunidad Foral de Navarra, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, País Vasco, Principado de Asturias, Región de Murcia y La Rioja, fueran diferentes. Creo entonces y sin temor de equivocarme que hay más diferencias en estas normativas que en las monedas o las unidades de medida mencionadas; lo cual a mi criterio es preocupante y grave.
Lo único imposible es lo que no se intenta
Agradecimientos
- Arquitecto Sebastián Papich – Espacio Domótica – Montevideo – Uruguay
- Arquitecta Gigliola Sol - Hogartecno – Montevideo – Uruguay
- Gonzalo Echevarría – Founder & CEO en OpenHome – Montevideo - Uruguay
Referencias
- Arquitectura&Diseño Noviembre 2018 – Espacio Domótica – Montevideo – Uruguay (1)
- Revista Ecoconstrucción Enero-Febrero 2019 – Pág. 52 – Madrid – España
- Informe Olivenza 2017/2018 sobre la situación general de la discapacidad en España. Antonio Jiménez Lara y Agustín Huete García (Coords.). –
- Inarquia – España – 18 de enero 2019 https://inarquia.es/accesibilidad-comunidades-vecinos
- Boletín informativo del Instituto Nacional de Estadística – Panorama de la discapacidad en España- Encuesta de Discapacidad, Autonomía personal y situaciones de Dependencia. 2008(2)
- Norma UNIT 200-2018 – Uruguay
- Decreto No. 34650 del 23.5.2013 Junta Departamental de Montevideo http://www.juntamvd.gub.uy/es.php/archivos.php/decretos/8619-34650.htm
- Resolución No. 898/14 del 10.3.2014 Artículo R.1894.8 Intendencia Municipal de Montevideo http://www.montevideo.gub.uy/asl/sistemas/Gestar/resoluci.nsf/WEB/Numero/898-14
- V Congreso de Edificios Inteligentes - Madrid - Mayo 14 2019 – Libro de las Comunicaciones / pág. 116 “Desarrollos inmobiliarios - Previsión en accesibilidad motriz”.
Antecedentes
Revista Ecoconstrucción Noviembre - Diciembre 2017: Pág. 38 a 41
https://issuu.com/ecoconstruccion/docs/ecoconstrucci__n_54_baja/38
Revista Ecoconstrucción Septiembre - Octubre 2018: Pág. 20 a 23
https://issuu.com/ecoconstruccion/docs/ecoc_sep_oct_br/20
Revista Ecoconstrucción Diciembre 2018: Pág. 54 a 55
https://issuu.com/ecoconstruccion/docs/ecoconstruccio_n_60/54
Nombre | Juan Valsechi y Miguel Ángel Lanao |
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Empresa | |
Cargo | Asesor Independiente, Consultor |
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