Ya es posible que un edificio sepa por sí mismo cómo reaccionar en caso de peligro, protegiendo a sus ocupantes de manera proactiva e inteligente. Loxone, firma especializada en la automatización de viviendas y edificios, dispone de un sistema con una amplia variedad de componentes que trabajan en conjunto para detectar y responder a posibles peligros, desde sensores de movimiento, inundación, humo y calidad del aire, hasta alarmas integradas.
Las luces pueden parpadear, las persianas subirán o bajarán automáticamente, y se activarán alarmas sonoras y visuales para disuadir intrusos y minimizar daños. Todo esto se hace de manera automatizada y eficiente, proporcionando una capa adicional de seguridad y tranquilidad.
Loxone ha conseguido que la seguridad vaya más allá de una simple alarma. El suyo es un sistema completo de reacciones coordinadas que protegen una vivienda o edificio contra una amplia variedad de peligros. Permite recibir notificaciones inmediatas ante cualquier amenaza, manteniendo a los usuarios siempre informados y tranquilos.
El sistema inteligente, controlado por el Miniserver, asegura que todo el edificio reaccione ante una alarma, adaptando sus acciones según el peligro identificado para reducir los riesgos. Con la App Loxone, se puede revisar el estado del sistema de alarma en cualquier momento, y activarlo o desactivarlo fácilmente cuando sea necesario.
Para una instalación inalámbrica, los productos de la gama Air ofrecen flexibilidad y simplicidad, permitiendo una comunicación fiable entre los distintos componentes del sistema Loxone sin las limitaciones de los cables. No es necesario un costoso sistema de alarma adicional; los componentes existentes, como detectores de presencia, contactos de puertas, luces y persianas, se combinan para formar un sistema de alarma completo, sin mensualidades, que protege de manera fiable contra cualquier peligro.
Los pulsadores Touch, con termómetro integrado, activarán una alarma si detectan una temperatura demasiado alta y la ventilación se detendrá automáticamente para limitar la propagación del fuego. También se puede optar por el Sensor Confort, que mide la temperatura, la humedad y cuenta con un sensor de CO2. El principal riesgo de incendio en un edificio es el sobrecalentamiento del cuadro eléctrico. Por ello, el Miniserver de Loxone, instalado en el cuadro eléctrico de la vivienda o edificio, está equipado con una sonda de temperatura que enviará una notificación inmediata si detecta una temperatura elevada.
Cuando se detecta una intrusión a través de los contactos de puertas y ventanas o los detectores de presencia, la alarma se activa con una serie de alertas graduales. Primero, envía notificaciones al dispositivo, seguido de una alarma sonora y visual.
Además, se activan otras medidas para disuadir al intruso y alertar a los vecinos: las luces comienzan a parpadear, las persianas suben y suena la alarma. De esta manera, el intruso se sentirá expuesto y desorientado, aumentando la seguridad de la vivienda o edificio.
Las inundaciones pueden causar daños significativos, pero con los sensores de inundación de Loxone, se está protegido. Su sistema detecta inmediatamente cualquier presencia de agua inusual. Si esto ocurre, la alarma se activa y el suministro de agua se corta automáticamente para minimizar los daños. Además, envía notificaciones en tiempo real para estar informado y poder reaccionar rápidamente, evitando posibles daños mayores.
Dependiendo de la ubicación, así como de la época del año, se podrían dar condiciones climáticas adversas como tormentas o heladas. Con Loxone, se pueden recibir notificaciones inmediatas cuando se detecta una situación peligrosa. El edificio activará su modo de protección, cerrando o abriendo automáticamente elementos para salvaguardar la propiedad. Además, con el actuador de persianas Air, se protege de manera inmediata contra los vientos fuertes y las heladas, asegurando la seguridad y bienestar del hogar.
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