"Solar Powers Heat 2023" el nuevo informe de la asociación SolarPower Europe resalta las ventajas de la combinación de la energía solar fotovoltaica y las bombas de calor para que los hogares ahorren en la factura de la energía.
El informe ha examinado el sector residencial de tres mercados europeos Alemania, España e Italia. En estos países el gas sigue jugando un papel dominante en la calefacción doméstica. En concreto, el informe evalúa el papel de la energía solar fotovoltaica en combinación con soluciones de calefacción basadas en la electricidad para que los hogares reduzcan el consumo de gas y ahorren ahorrar en las facturas de electricidad y calefacción
Los resultados lanzan un prometedor resultado sobre la combinación de la energía solar fotovoltaica con las bombas de calor. Las viviendas que contaban con estas instalaciones ahorraron hasta un 84 % en sus facturas domésticas en 2022, lo que equivale a una diferencia de hasta 3700 € frente a las viviendas que dependen de los combustibles fósiles.
El año 2022 ha sido un año récord para ambas tecnologías en Europa, debido a que los ciudadanos han buscado soluciones para reducir sus facturas energéticas y su dependencia de los combustibles fósiles. Las instalaciones fotovoltaicas sobre cubiertas (autoconsumo) aumentaron en estos tres importantes economías europeas, destacando Italia con un 240% y España con un aumento del 106% y un 9% en Alemania. Las instalaciones de bombas de calor aumentaron su presencia en el ámbito residencial sobre todo en Alemania con un 53% de nuevos proyectos seguido con un 37% por Italia y un 21% en España.
Los expertos pronostican que incluso si los precios del gas caen a los niveles anteriores a la crisis, las instalaciones de energía solar fotovoltaica con bomba de calor seguirán ahorrando a los hogares hasta un 73 %. En el escenario más probable donde los precios del gas se estabilicen a un nivel más alto, los europeos ahorrarán hasta un 76%.
Por otra parte, el informe desarma los argumentos de que la energía solar fotovoltaica no ayuda a calentar las casas durante los meses fríos. Los nuevos números muestran que, en todos los climas, la energía solar fotovoltaica residencial hace una contribución significativa para disminuir la presión de la demanda en las redes eléctricas.
Incluso en años con inviernos particularmente fríos, en el norte de Europa, la energía solar fotovoltaica puede contribuir con el 36 % de las necesidades de una bomba de calor. En años con inviernos cálidos (cada vez más comunes), hasta el 63 % de las necesidades de electricidad de una bomba de calor pueden cubrirse con energía solar fotovoltaica.
Como propuesta para acelerar la transformación en toda Europa el informe reclama políticas a nivel nacional y de la UE para garantizar a los propietarios un retorno de la inversión en 10 años.
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