En un reciente estudio llevado a cabo por Tecnalia, se reveló que la elección de ventanas de aluminio no solo aporta un ahorro significativo de energía, sino que también ofrece una serie de beneficios que las destacan como la opción más inteligente para cualquier hogar.
Contrario a la creencia común, el marco de las ventanas, aunque importante, influye mucho menos en la eficiencia energética de una ventana en comparación con el vidrio. La clave está en elegir una ventana que, en su conjunto (marco más vidrio), ofrezca la transmitancia térmica más baja posible. En este sentido, las ventanas de aluminio destacan al ofrecer una excelente resistencia y durabilidad a lo largo del tiempo.
El aluminio se destaca como un material ecológico al ser 100% reciclable infinitas veces, lo que lo convierte en una elección sostenible irrebatible. En comparación, los marcos de plástico-pvc no solo carecen de valor de reciclaje, sino que a menudo requieren costos adicionales para su eliminación.
Las ventanas de aluminio permiten perfiles más delgados, maximizando el área acristalada hasta un impresionante 85% de la superficie total de la ventana. Además, ofrecen innumerables posibilidades estéticas, desde acabados decorativos hasta una amplia variedad de colores metálicos.
La resistencia del aluminio ante las condiciones climáticas extremas es sorprendente. Ejemplos como las ventanas del Empire State Building en Nueva York, instaladas hace setenta años y que aún lucen como nuevas, demuestran su durabilidad a largo plazo.
Si analizamos el aislamiento de una ventana, teniendo en cuenta el conjunto (marco y vidrio), la diferencia en el ahorro de consumo energético que se consigue al instalar una ventana con marcos de uno u otro material es casi inexistente (Estudio "La Influencia del marco de la ventana en la calificación energética de los edificios")
¿Qué ventanas aíslan más? Las ventanas de aluminio consiguen un aislamiento acústico prácticamente igual a las de otros materiales pero, con una ventaja, el aluminio se mantendrá inalterable a lo largo de los años, y por lo tanto sus valores también lo harán, mientras que otros materiales sufren con el tiempo deformaciones y alteraciones.
Las ventanas de aluminio resisten temperaturas elevadas en caso de incendio, sin emitir humos ni gases tóxicos. Además, su resistencia intrínseca minimiza los riesgos de intrusiones forzosas, proporcionando una seguridad adicional al hogar.
Al buscar ventanas que no solo duren mucho, sino que mantengan sus propiedades con el tiempo, el aluminio destaca como la opción más rentable y de alta calidad en el mercado.
En resumen, elegir ventanas de aluminio no solo es una decisión inteligente desde el punto de vista energético, sino que también brinda beneficios ecológicos, estéticos, duraderos y seguros para cualquier hogar. Con garantías de calidad reconocidas internacionalmente, el aluminio se presenta como la opción completa para aquellos que buscan lo mejor para su vivienda.
Para garantizar soluciones realizadas en aluminio, el sector posee 3 marcas de calidad de reconocido prestigio internacional: Qualicoat (aluminio lacado), Qualanod (aluminio anodizado), y Qualideco (acabados decorativos del aluminio como el efecto madera).
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